Ivy Kirk, en la búsqueda de lo etéreo

La marca americana busca ser referente en el continente

La colección Ivy Kirk, con un enfoque en la forma escultórica y los detalles de la superficie inspirados en la delicada costura del siglo XIX, así como en las siluetas de alta costura de los años 70, sirve para crear un atuendo, en lugar de solo completar uno.

Producido en la ciudad de Nueva York a partir de algodones de lujo italianos y bordados personalizados, por un equipo altamente calificado dedicado a la calidad y la artesanía, no se pasa por alto ningún área de una prenda ni se desprecia ningún detalle.

Parte integral del espíritu de la colección Ivy Kirk es una mezcla de suavidad y estructura, feminidad y borde, simplicidad y adorno, consideración y sin esfuerzo, nostalgia y modernidad, creando una apariencia que es a la vez especial, pero también fácil de usar.

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IVI KIRK, LA DISEÑADORA QUE SE INSPIRA EN LOS AIRES RETROS

Ivy creció en una familia creativa y pasó sus fines de semana en la escuela secundaria y secundaria, tomando clases de diseño de moda en Parsons. Siempre supo que quería tener su propia colección.

Naturalmente, cuando llegó el momento de ingresar a la universidad, solicitó ingreso a Parsons. Después de graduarse en 2009, consiguió un trabajo como diseñadora para Kate Spade.

En 2016, Ivy se encontró con una clase que estaba enseñando flores de alta costura para ropa y sombrerería, ubicada en un castillo en el sur de Francia. Ella se inscribió y renunció a su trabajo.

Fue en un viaje al mercadillo con la clase que encontró la primera inspiración para la colección: ropa de cama antigua bordada a mano y ropa infantil francesa del siglo XIX. Tenía un concepto claro para la colección cuando regresó a Nueva York. Su primera colección se lanzó oficialmente para la primavera de 2020.

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