De los Fendi Bag Bugs a los Labubu: el auge de los charms

DE LOS FENDI BAG BUGS A LOS LABUBU: EL AUGE DE LOS CHARMS


Los Fendi Bag Bugs marcaron una era de lujo irreverente y dieron origen al fenómeno de los charms high fashion. Hoy, los Labubu recogen su legado


No era un accesorio, era un statement. Cuando Karl Lagerfeld lanzó los Fendi Bag Bugs en 2013, no solo introdujo un nuevo must: creó una categoría completa. Estos charms peludos con ojos se colgaban de los bolsos más cool del momento y se convirtieron en el símbolo de un lujo juguetón y descarado. Diez años después, el legado continúa—pero en otra forma. Se llama Labubu, y aunque cambió por completo, la energía sigue siendo la misma: ser el charm de las bolsas más cool.

LOS BAG BUGS, EL HYPE ORIGINAL DE LOS CHARMS

Diseñados bajo la visión de Lagerfeld, los Bag Bugs de Fendi (también conocidos como Monster Charms) fueron hechos en piel de zorro, visón y conejo. Cada uno tenía una cara monstruosa exagerada, entre cómica y siniestra, que los hacía cool. Costaban más de mil dólares y, aún así, se agotaban. Fueron llevados por celebridades y editores  que entendían que la moda también es humor, exceso y todo eso absurdo pero calculado.

El problema: la piel. La controversia en torno al uso de fur real puso presión sobre Fendi, y sobre toda la industria.

LABUBU: EL NUEVO CHARM DE LA GENERACIÓN Z

Mientras los Bag Bugs eran puro lujo, los Labubu son pura cultura toy asiática. Diseñados por Kasing Lung y producidos por How2work, nacieron como figuras de colección pero rápidamente pasaron al mundo fashion como charms para bolsas, especialmente entre fans de la estética Y2K, coquette y streetwear.

Con sus ojos tristes, orejas y formas, los Labubu encajan perfectamente en el universo de accesorios virales. No son solo juguetes. Y a diferencia de los Bag Bugs, aquí el precio no es un muro infranqueable, sino parte del juego. Ediciones limitadas, colaboraciones y lanzamientos sorpresa los vuelven aún más cool.

DE ACCESORIO A PARTE DE NUESTRA IDENTIDAD

En el fondo, tanto los Fendi Bag Bugs como los Labubu representan lo mismo: el deseo de personalizar lo cotidiano. Colgar un charm no es solo decorar. Y en una época donde la individualidad visual importa tanto como el logo, estos pequeños monstruos se convierten en poderosos musts de estilo.