Microblading: qué es, cuánto dura y recomendaciones

MICROBLADING: TODO LO QUE NECESITAS SABER SOBRE ESTA TÉCNICA PARA CEJAS PERFECTAS

Publicada en: 5 de mayo de 2025 a las 1:06 PM

El microblanding promete cejas definidas, simétricas y naturales sin necesidad de maquillaje diario. Te contamos qué es, cuánto dura y qué cuidados debes tener si estás pensando en hacértelo.

El microblading se ha convertido en uno de los tratamientos estéticos más populares de los últimos años, especialmente entre quienes buscan una solución práctica para tener cejas más pobladas, definidas y con una forma armónica. Esta técnica de belleza semipermanente, que toma inspiración del tatuaje tradicional pero con herramientas mucho más delicadas, permite rediseñar las cejas pelo a pelo, logrando un resultado increíblemente natural. Celebridades, influencers y expertos en belleza la recomiendan como la alternativa perfecta para olvidarte del lápiz de cejas y levantarte todos los días con una mirada más expresiva.

Si estás buscando renovar tus cejas o corregir asimetrías sin caer en tratamientos invasivos, el microblading puede ser la respuesta. Aquí te explicamos con detalle todo lo que necesitas saber antes de decidirte: desde qué es exactamente esta técnica, cuánto dura, cómo se hace, qué debes considerar para cuidar tus cejas después del procedimiento y cuáles son las diferencias clave con otras técnicas como la micropigmentación.

¿QUÉ ES EL MICROBLADING?

El microblading es una técnica de maquillaje semipermanente que consiste en dibujar manualmente trazos similares a vellos en la piel, imitando el crecimiento natural de las cejas. Se realiza con una herramienta de pequeñas agujas (llamada tebori) que deposita pigmento en la capa superficial de la dermis. A diferencia de un tatuaje tradicional, el microblading ofrece un acabado más natural y menos invasivo.

Esta técnica se adapta a la forma del rostro y a las características personales de cada persona, por eso es tan popular entre quienes buscan personalizar al máximo su expresión facial. No solo mejora la apariencia de las cejas, sino que también puede corregir zonas con poca densidad, cicatrices o asimetrías. Es ideal para quienes buscan practicidad y definición sin perder naturalidad. Además, gracias al enfoque artesanal de esta técnica, el resultado final no luce artificial ni rígido, lo que permite mantener una estética muy orgánica.

¿CUÁNTO DURA EL MICROBLADING EN LAS CEJAS?

  • El microblading tiene una duración promedio de entre 12 y 18 meses.
  • El tiempo puede variar según el tipo de piel, cuidados posteriores y estilo de vida.
  • Se recomienda un retoque entre los 30 y 60 días posteriores al procedimiento para perfeccionar el diseño y fijar el pigmento.

¿CÓMO SE HACE EL MICROBLADING?

El procedimiento de microblading comienza con una evaluación personalizada del rostro para diseñar la forma ideal de las cejas según tus proporciones faciales. El especialista utiliza un compás de medición o herramientas digitales para trazar una guía previa al pigmentado. Luego se elige el tono adecuado del pigmento, que debe armonizar con tu color natural de vello y piel.

Después de limpiar y preparar la zona, se aplica una crema anestésica tópica para minimizar las molestias. Con la herramienta manual (tebori), el especialista traza línea por línea los «pelitos» que formarán la nueva ceja. Es un proceso artesanal y detallado que dura entre 1 a 2 horas. El resultado es inmediato, aunque el color se ajustará durante los días posteriores mientras sana la piel. En muchos casos, el proceso puede dividirse en dos sesiones: la primera para crear la base del diseño y la segunda, entre cuatro y ocho semanas después, para hacer los retoques finales y asegurar una fijación óptima del pigmento.

¿ES DOLOROSO HACERSE MICROBLADING?

El microblading puede generar molestias leves, pero no suele ser doloroso. La mayoría de los especialistas aplican anestesia tópica antes de comenzar el procedimiento, lo que reduce significativamente cualquier sensación incómoda. Algunas personas comparan la sensación con un raspado suave o un leve ardor, especialmente en zonas sensibles de la piel. Sin embargo, el nivel de incomodidad varía según el umbral de dolor de cada persona y el profesional que realice el tratamiento. Además, es normal que después del procedimiento se sienta una ligera sensibilidad o enrojecimiento, que desaparece a las pocas horas. Si bien la experiencia es subjetiva, la mayoría de quienes se lo hacen afirman que vale la pena.

¿CUÁLES SON LOS CUIDADOS DESPUÉS DEL MICROBLADING?

El cuidado posterior es clave para lograr buenos resultados. Durante los primeros días, la piel entra en una fase de cicatrización donde el pigmento puede verse más oscuro o con pequeñas costras. Es importante no arrancarlas ni rascarse para evitar cicatrices o pérdida de pigmento. Se recomienda evitar el sol, el maquillaje en la zona y el ejercicio intenso por al menos una semana. También es fundamental aplicar los productos recomendados por el especialista, como pomadas cicatrizantes o lociones antibacterianas. En general, los cuidados pueden extenderse por dos semanas hasta que la piel esté completamente recuperada. Respetar estos pasos es lo que realmente marca la diferencia entre un resultado que se mantiene impecable y otro que se desvanece con rapidez.

¿QUIÉN PUEDE HACERSE MICROBLADING?

Esta técnica está recomendada para cualquier persona mayor de edad que desee mejorar la forma, densidad o simetría de sus cejas. Es ideal para quienes han perdido vello por condiciones médicas, tienen cicatrices o simplemente buscan un cambio estético. Sin embargo, no está indicado para personas con piel extremadamente grasa, dermatitis activa, diabetes descontrolada, embarazadas o en periodo de lactancia, ya que estos factores pueden afectar el proceso de cicatrización o la retención del pigmento. Además, si tienes tendencia a desarrollar queloides o estás en tratamiento con anticoagulantes, es fundamental que consultes con un especialista antes de realizar el procedimiento.

¿QUÉ DIFERENCIAS HAY ENTRE MICROBLADING Y MICROPIGMENTACIÓN?

Aunque ambas técnicas son semipermanentes y se utilizan para embellecer las cejas, tienen diferencias clave. El microblading se realiza manualmente y los trazos imitan el pelo natural con gran precisión, ideal para un acabado más delicado y natural. En cambio, la micropigmentación se hace con una máquina similar a la del tatuaje y tiende a rellenar más que a trazar, dando un aspecto más sólido. Además, la micropigmentación suele durar más tiempo y es más adecuada para pieles grasas.

Otra diferencia importante es el proceso de cicatrización: mientras el microblading requiere más cuidado durante las primeras semanas, la micropigmentación suele tener una recuperación más rápida y menos sensible a factores externos. La elección entre ambas depende del tipo de piel, el estilo deseado y el presupuesto. En cualquier caso, lo más importante es acudir a un profesional certificado que te asesore correctamente y garantice un resultado seguro y personalizado.

En resumen, si buscas una solución estética de bajo mantenimiento con un resultado natural y expresivo, el microblading puede ser perfecto para ti. Solo recuerda elegir un profesional capacitado, seguir todos los cuidados recomendados y tener expectativas realistas sobre su duración y mantenimiento. Así lograrás unas cejas que hablen por sí solas sin necesidad de maquillaje. El arte del microblading no es solo una moda, es una herramienta poderosa para potenciar tu estilo, tu mirada y tu confianza.