La historia del café y sus variantes para beber

Existen una gran variedad de bebidas que incluyen café como ingrediente principal.

Esta bebida que reúne a familias, amigos y enamorados cuenta con una variedad de formas para poder saborearlo, aquí te dejamos un recorrido por las formas en las que puedes degustarlo.

La historia del café tiene sus raíces en África, específicamente en la región de Etiopía.

La leyenda más conocida sobre el descubrimiento del café se refiere a un pastor llamado Kaldi, quien vivía en la región de Kaffa en Etiopía alrededor del siglo IX. Según la leyenda, Kaldi observó que sus cabras se volvían más animadas y llenas de energía después de comer las bayas rojas de cierto arbusto. Intrigado, probó las bayas él mismo y experimentó una sensación renovada de vitalidad.

Kaldi compartió su descubrimiento con un monje de un monasterio local, quien decidió hacer una infusión con las bayas para resistir la fatiga durante las largas horas de oración.

La noticia del efecto estimulante de estas bayas se extendió y llegó a otros monasterios en la región. Con el tiempo, el conocimiento sobre estas bayas se difundió por la península arábiga.

Los árabes comenzaron a cultivar y comercializar café en la región de Yemen, y hacia el siglo XV, las primeras cafeterías conocidas como «qahveh khaneh» empezaron a aparecer en las ciudades árabes. Estos lugares se convirtieron en centros de actividad social y discusión.

El café se extendió por el mundo árabe y, eventualmente, llegó a Europa, donde se establecieron las primeras cafeterías en el siglo XVII. Desde entonces, el café se ha convertido en una de las bebidas más populares y consumidas en todo el mundo.

La popularidad del café ha llevado al desarrollo de diversas variedades, métodos de preparación y tradiciones asociadas con esta bebida, haciendo que el café sea una parte integral de la cultura.

¿Cómo prefieres tu bebida?

Espresso: Una pequeña cantidad de café concentrado, hecho al forzar agua caliente a través de granos de café molidos finamente.

Americano: Café espresso diluido con agua caliente, resultando en una bebida más parecida al café filtrado.

Latte: Hecho con espresso y una cantidad generosa de leche vaporizada. Puede tener saborizantes añadidos como vainilla o caramelo.

Cappuccino: Una mezcla equilibrada de espresso, leche vaporizada y espuma de leche.

Macchiato: Espresso con una pequeña cantidad de leche o espuma de leche.

Mocha: Café con leche vaporizada y jarabe de chocolate, coronado con crema batida.

Café con Leche: Café filtrado o espresso con una cantidad igual de leche caliente.

Affogato: Una bola de helado «ahogada» con un espresso caliente.

Flat White: Similar a un latte, pero con menos espuma y más concentración de café.

Café con Hielo: Café filtrado o espresso servido sobre hielo, a veces endulzado y con leche.

Irish Coffee: Café con whisky irlandés, azúcar y crema. 

Café Turco: Café molido fino cocido con agua y azúcar en un recipiente especial llamado cezve, a menudo aromatizado con especias como cardamomo.

Café Vietnamita: Café filtrado sobre una capa de leche condensada, servido tanto caliente como frío.

Café Cortado: Espresso con una pequeña cantidad de leche, generalmente menos que un macchiato.

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