ERIK HAYSER: POR EL BOULEVARD DE LOS SUEÑOS

Partiendo de la vida, los sentimientos, los placeres y el arte de la actuación, Erik Hayser se muestra con NOIR.

Para esta portada, nos encontramos con la fortuna de coincidir en el momento más pleno de ambos proyectos: el editorial y el actoral. Con una sonrisa profunda y una personalidad que celebra el arte del buen vivir, Erik Hayser nos llevó a un viaje donde los sueños son el único objetivo.

Su capacidad innata para adaptarse a diferentes roles y formatos quedó demostrada en series como Ingobernable (2017), donde dio vida al primer caballero de México, lo que le valió reconocimiento internacional. Su participación en Oscuro deseo (2020) consolidó su posición como uno de los actores más solicitados del momento.

Ahora que no estás, comedia dramática de Amazon Prime, es su nuevo proyecto, junto a Ana Serradilla. En esta historia que toca fibras sensibles y transita entre la risa y el llanto, confiesa haber encontrado el papel que mejor refleja su personalidad: «Estoy feliz. Me siento pleno, esa es la palabra que describe cómo me encuentro ahora. Después de muchísimo tiempo, estoy en un momento de madurez personal y profesional […] con la posibilidad de disfrutar cada instante. He perdido la prisa que más joven tenía; amaba estar en el rush, era una necesidad fisiológica que me hacía sentir muy bien. Ahora llevo una vida más equilibrada donde puedo observar las maravillas y los milagros que la vida me ofrece día con día».

Al hablar de su papel como Javi en Ahora que no estás, Erik reflexiona sobre cómo este personaje llegó en un momento crucial de su carrera, permitiéndole mostrar una faceta más íntima y personal: «En 23 años de carrera he construido proyectos que van más allá del entretenimiento, […] desde crítica política hasta social, cosas que yo quería decir como persona y como artista. Hacer un proyecto que de alguna manera me invitara a no transformarme y crear un personaje […] que, de forma curiosa, fuera más vertiginoso, más complejo, que […] me pusiera en un riesgo de vulnerabilidad […], que me obligara a entrarle de una manera distinta. […] Leí el guion y sentí que tenía que decir mucho como Erik, pues requería enfrentarme a varias de las cosas que estaba viviendo Javi. Este es el proyecto que necesitaba, […] donde la gente me viera de manera romántica y también profunda. Me recordaba mucho a estas películas de los años noventa, que no solo entretenían, sino que te llevaban a una reflexión y dije “¡Esto quiero hacer!”. Me he enfrentado a un proyecto hermosísimo […] con la complejidad de prestar lo que yo soy, permitiendo que Javi hable a través de mí».

Cuando un artista está en su mejor momento, se percibe, vibra e incluso irradia luz, algo que logramos capturar. Vemos a un Erik Hayser apasionado por contar historias desde múltiples perspectivas ante la cámara de NOIR, como productor, guionista y actor. En cada faceta ha logrado un compromiso que refleja su visión integral del arte como un medio para generar reflexión y empatía.

«Mi filosofía de vida ha ido cambiando […] y me encanta porque la única constante es el cambio y siempre estoy abierto a eso. Tomo prestadas las palabras de Joaquín Sabina, quien se da la libertad de contradecirse siempre y […] si reconocemos que así es la vida, eso significa crecimiento. […] La vida es demasiado corta como para no aprovechar cada instante, como si fuera el último. Me atrevo a decir que siempre he sido un soñador, consciente de que mi vida puede apagarse en cualquier momento y quiero estar listo para partir con una sonrisa, como estoy ahora».

Sus sueños, confiesa, se han ido transformando, volviéndose más personales. Hayser anhela una vida con mayor equilibrio familiar, donde su vida íntima sea lo prioritario. Su aspiración constante ha sido que el trabajo lo lleve a recorrer el mundo y que sigan llegando proyectos que lo reten a ser mejor humano.

Finalmente, nos adentramos en sus gustos y placeres: «Soy un sibarita, amo los placeres de la vida, amo comer, amo cocinar. Si no fuera actor hubiera sido chef, siempre estoy pensando en qué vamos a probar, qué voy a cocinar. Llevo muchos años coleccionando botellas de whisky, particularmente de Macallan; me encantan los vinos, esos no los colecciono, los uso para destaparlos de manera constante. Considero la amistad de manera sagrada, tengo pocos amigos, muy cercanos. Practico tenis, en algún momento quise ser jugador profesional. Mi color favorito es el azul. Amo la música de autor, Gian Marco es uno de ellos; Robbie Williams es mi cantante favorito, me parece un artista con todo el sentido de la palabra, he seguido toda su carrera, he cruzado a Europa para verlo; amo a Joaquín Sabina».

Erik Hayser nos ha situado en el presente compartiendo el placer de vivir el ahora mientras preserva los sueños como un caramelo por saborear. Sus reflexiones nos exhortan a explorar los límites de la creatividad. Sin duda, es un artista cuya fascinante trayectoria merece seguir de cerca.