Noir se reúne en entrevista con Meredith Mickelson; la actriz mexicana ejemplo de valentía y esfuerzo, habilidades que hoy la colocan como un nuevo referente en la industria

La vida te da tantas oportunidades como estés dispuesta a tomarlas. Esta frase define a la perfección la figura de Meredith Mickelson, ejemplo de valentía y esfuerzo, habilidades que hoy la colocan como un nuevo referente en la industria. Acompáñanos a conocer más de una estrella en ascenso. 

Para Meredith Mickelson, el balance es el factor más importante para el crecimiento personal y profesional. Durante 8 años, la modelo ha conocido y explorado diferentes horizontes que la han llevado a convertirse en uno de los rostros más importantes del modelaje.

Pero su camino no ha sido sencillo: con fortaleza y humildad ha logrado sobreponerse a las adversidades. “No termino de creer todo lo que he hecho, pero es resultado de no rendirme ni dejar de intentar. Hubo ocasiones en las que era más fácil renunciar, pero me doy crédito por seguir adelante”, comentó la modelo en charla exclusiva para Noir. Gracias a su empeño, se convirtió en portada de las revistas más importantes del mundo, rostro de diversas campañas y parte de libros icónicos.

Para Meredith, la moda es una de las formas más bellas del arte y la mente humana, a grado tal que le ayudó en una de las etapas más difíciles de su vida. “La moda es la razón de lo que soy. Me mantiene en constante crecimiento como persona y me brinda la libertad de ser yo sin miedo, además de llevar mi amor y creatividad más allá de los límites”, comenta.

Al formar parte de una industria en constante cambio, encontrar el equilibrio se convierte en una tarea complicada. Sin embargo, con el tiempo ha logrado balancear lo personal y lo profesional. “Soy una persona muy introvertida, por lo que disfruto mucho estar en casa para cenar o salir con amigos.

Disfruto mucho de tomar un respiro de la industria, pues eso me hace recordar las cosas importantes en mi vida”, nos platica. Además de compartirnos lo importante que es para ella conectar con todo lo que la rodea, nos habla de las pequeñas cosas que se convierten en rutina: aquellos instantes que nos hacen felices y nos de fnen mucho más que nuestras profesiones, pues al fnal, lo único que tenemos son los recuerdos de lo cotidiano.

Es en este contexto que Meredith disfruta de una pasión poco conocida: la poesía. “Cuando leo un libro de poemas me ayuda a sentirme comprendida. Escribir me hace reconocer lo que siento en el momento, sobre todo cuando estoy triste, porque me permite aceptar el estado en el que estoy”. 

Dicha actividad la ayudó durante una etapa muy complicada, la pérdida de su hermano, una de las personas más especiales en su vida. “A él le debo ser la persona en quien me he convertido. Todo lo que él representaba, la luz y el amor que daba al mundo, es un legado que quiero continuar”. Con el paso del tiempo convirtió el dolor en una lección que la ha ayudado a mantener la fuerza y humildad. “Es en momentos como ese donde tomas la decisión de romperte o crecer. Yo opté por crecer. La sensación de estar cerca de él me hace sentir protegida y me ayuda a ver la belleza de la vida. El amor que doy a los demás, estar más presente, agradecer las oportunidades y conectar con las personas me ha llevado a convertirme en la persona que estaba destinada a ser”.

Esta in fuencia la llevó a descubrir su amor por la actuación. “Mi hermano fue quien me insistió para intentarlo. Yo me sentía asustada e insegura, no sabía nada y estaba en constante aprendizaje. Sin embargo, encontrarme en una situación vulnerable e incómoda me dio la fuerza para atreverme. Una vez que mi hermano falleció, los proyectos comenzaron a llegar y me sentí satisfecha porque nunca antes había sentido algo con tanto signi fcado, además de una gran conexión con él”. A partir de este momento, la actuación se convirtió en una pasión alterna al modelaje, actividades que ha sabido combinar, pues de pronto se dio cuenta que estar en la pasarela es, de cierto modo, actuar.

Gracias a esta experiencia, su carrera dio un salto, mismo que vino acompañado con su mudanza a París, ciudad ideal para comenzar de nuevo. “Mi vida cambió por completo, salí de mi zona de confort y crecí como persona. Aprendí a vivir el ahora de formas que nunca antes había hecho”, comentó. Todo lo anterior la hizo romper con los estándares y conectar más con las personas, dando prioridad a la salud mental, tema que considera sumamente relevante, por eso ha formado parte de varias luchas en torno a este tema. “Es importante que las personas sepan que no todo es felicidad y belleza: todos luchamos contra algo y no es necesario pasar por eso solos.

Descubrir quién eres, amar y agradecer todas las oportunidades de la vida es lo que nos hace ver la belleza de las cosas”, puntualiza.

Es así que, a través de sus propias vivencias, con una película a punto de estrenarse y diversos proyectos en puerta, Meredith se ha convertido en un ejemplo de fuerza, valentía y perseverancia que nos invita a explorar lo desconocido, así como luchar por los sueños que anhelamos. “No importa cuantas veces te caigas y toques el suelo, la vida siempre te dará una segunda oportunidad, siempre y cuando estés dispuesta a tomarla”, concluye.

Este texto es una extracto de la entrevista realizada por Michelle Ortiz. Continúa leyendo la entrevista completa en nuestra edición impresa.