Rumbo a la coronación: recordemos el momento de la Reina Isabel II 

Una histórica coronación…

La Reina Isabel II se convirtió en soberana del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte, el día que su papá Jorge VI murió, esto fue el 6 de febrero de 1952.

Isabel II, nació en Elizabeth Alexandra Mary; Londres, Inglaterra. Su reinado concluyó en septiembre de 2022. Su reinado perduró por más de siete décadas esto la posiciona como la monarca británica mujer que hasta ahora ha marcado una icónica historia.

El príncipe Felipe se encargó de que la Coronación de su esposa fuera épica; ideó un plan para que el acto se televisara y que alrededor de 27 millones de personas pudieran ver la ceremonia y otros 11 millones lo escucharon en la radio. Sin contar a los ocho mil asistentes en la Abadía de Westminster.

La Coronación de la reina Isabel II se realizó 16 años después que la de su padre, el Rey Jorge VI, en este momento se continuó con los preparativos ya establecidos para la investidura del rey Eduardo VIII, quien cedió para vivir su amor junto a Wallis Simpson.

La fecha elegida para la reina Isabel II fue el 2 de junio, la ceremonia se llevó a cabo en la Abadía de Westminster, como marca la tradición. Además, el duque de Edimburgo tomó un papel muy importante, encabezando el Comité de Coronación. 

Para el histórico evento, la reina Isabel II se trasladó desde Buckingham a la Abadía de Westminster en un carruaje dorado llevado por caballos; en ese viajó durante la procesión de regreso a Buckingham. 

La vestimenta para una coronación 

La reina Isabel II supervisó todos los detalles de su vestimenta para el gran día, trabajó muy de cerca con el diseñador inglés Norman Hartnell.

Hartell, fue modisto para la reina María y posteriormente para la reina Isabel II, mismo que se encargó de la creación de su vestido de novia en 1947. La reina quiso que el vestido llevara detalles pensados por ella, finas flores bordadas que representaran no solamente a Reino Unido sino también a los países de la Commonwealth.

El vestido estaba compuesto por un trébol de cuatro hojas, símbolo de buena suerte, idea de Hartnell y de Isabel II, tomaron en cuenta el protocolo y la majestuosidad de la ocasión representada en los colores blanco y dorado.

Los zapatos, bañados en oro y con incrustaciones de rubíes, fueron una creación del zapatero francés Roger Vivier y fueron inspirados en la Catedral de Chartres de Francia.

El atuendo completo ha sido expuesto al público en tres ocasiones, la celebración del Jubileo de Platino fue la última.

Los accesorios de la coronación

Isabel II portó dos coronas el 2 de julio: la de San Eduardo y la del Estado Imperial. La primera es considerada la más importante, además de  esta corona sólo se utiliza al momento de la ceremonia de coronación.

Esta pieza fue fabricada en 1661 para la Coronación de Carlos II, tiene piedras incrustadas, pesa más de dos kilos y por esa razón es considerada una joya sagrada que la reina la utilizó una sola vez.

Antes de partir de Westminster, Isabel II reemplazó la corona de San Eduardo por la Corona del Estado Imperial. Una pieza de oro, con diamantes, perlas, rubíes, zafiros y esmeraldas, esta pieza es de menor peso y es la corona que usó la reina durante las aperturas del Parlamento a lo largo de su reinado.

Así fue la memorable fecha…

Con una asistencia de ocho mil personas que asistieron al histórico evento, además la Familia Real británica, en ese entonces los príncipes Carlos y Ana tenían 4 y 3 años.

A la ceremonia, también asistieron miembros del Parlamento, el primer ministro Winston Churchill, cabezas de estado y regentes de otras Casas Reales. Elizabeth Bowes-Lyon, también estuvo presente, así como la princesa Margarita. 

Tras la ceremonia, Isabel II salió al balcón a saludar a sus súbditos acompañada de su esposo y sus hijos. A casi 70 años de este gran acontecimiento, Reino Unido se prepara para presenciar una nueva Coronación, del rey Carlos III para así comenzar oficialmente una nueva era en la monarquía británica.

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