Area SS26: La nueva era bajo Nicholas Aburn conquista New York

EL DEBUT DE NICHOLAS ABURN EN AREA: EXCESO, IRONÍA Y SEDUCCIÓN


Area SS26: cuando lo urbano se convierte en alta costura.


En Nueva York, donde la moda siempre se mueve entre la irreverencia y la sofisticación, Area presentó uno de los debuts más esperados de la temporada: Nicholas Aburn al mando creativo. Su primera colección para la firma no fue tímida ni prudente —fue un golpe directo de energía que combinó calle y alta costura, lentejuelas futuristas y minifaldas salvajes. Una declaración clara: la nueva era de Area acaba de comenzar, y lo hace con garbo.

¿QUÉ TENDENCIAS DOMINARON LA PASARELA DE AREA SS26?

El desfile osciló entre lo urbano y lo sofisticado. Aburn abrió con una propuesta downtown street chic: cazadoras negras, vaqueros de pata ancha y minifaldas que parecían reinventarse en cada paso, como si los pantalones se hubieran transformado en improvisados cinturones.

Luego, la narrativa cambió de tono con vestidos de cóctel nacarados, faldas de seda y tops convertidos en verdaderas piezas de joyería. Un contraste calculado que habla de su visión: la calle y la alta costura ya no son mundos opuestos, sino dos lenguajes que conviven en la misma conversación.

El negro, protagonista en la apertura del desfile.
Detalles vanguardistas en seda y brillos nacarados.

¿QUÉ COLORES MARCARON EL RITMO DE LA COLECCIÓN?

El negro fue el punto de partida, con un aire casi rebelde, pero rápidamente la paleta se expandió hacia los tonos perlados y metálicos que evocaban sofisticación. Entre lentejuelas psicodélicas y brillos nacarados, se respiraba un deseo por capturar la luz —ya fuese de los focos de un club nocturno o del atardecer reflejándose en un rascacielos neoyorquino. La energía cromática se movió entre lo sobrio y lo vibrante, creando un vaivén que mantuvo a la audiencia expectante.

¿CUÁL FUE EL MENSAJE DETRÁS DE LA COLECCIÓN DE AREA SS26?

Más allá de las telas y los cortes, la propuesta de Aburn parecía declarar algo esencial: la moda es un terreno híbrido, donde lo cotidiano puede transformarse en espectáculo y lo glamuroso puede habitar la vida diaria. Las camisetas de fútbol convertidas en vestidos de fiesta fueron quizás el mejor ejemplo de esta filosofía. Una invitación a romper reglas, a vestir con ironía y a convertir cualquier escenario en pasarela.

Nicholas Aburn debuta como director creativo de Area.

¿QUÉ NOS DICE ESTE DEBUT DE NICHOLAS ABURN COMO DIRECTOR CREATIVO?

Con experiencia en Tom Ford, Alexander Wang y Balenciaga Haute Couture, Aburn llega a Area con una maleta cargada de referencias de lujo y riesgo creativo. ¿Lo necesita pulir? Sí. Algunas de sus piezas de lentejuelas y cadenas metálicas rozaban el déjà vu, recordando al universo de Germanier. Pero incluso con esos ecos, lo suyo se sintió fresco, poderoso y con potencial de marcar una nueva era. En resumen: un debut que no busca ser perfecto, sino memorable —y lo consiguió.

ENTONCES, ¿QUÉ PODEMOS ESPERAR DE AREA BAJO SU DIRECCIÓN?

Si algo quedó claro en este debut, es que Aburn no teme al exceso. Su talento apunta a convertir a Area en una plataforma de experimentación con impacto global. Puede que aún esté calibrando su narrativa, pero la dirección es clara: la marca seguirá siendo sinónimo de atrevimiento, ahora con un giro que mezcla la espontaneidad callejera con la precisión de la alta costura.

Un debut con garbo, ironía y carácter —justo lo que Nueva York necesitaba para reafirmar su lugar en la conversación global de la moda.