Balmaceda Studio, la marca de diseño textil mexicana

Creada por el diseñador, José María Balmaceda, la marca de diseño textil se especializa en tapetes modernos y sofisticados.

Por: Paola Sánchez

José María Balmaceda es un diseñador textil, originario de la Ciudad de México. Empezó su carrera trabajando como diseñador de vestuario, pero encontró su verdadera vocación en los textiles. Para descubrir este mundo, emprendió un viaje a la India y Nepal, donde se encuentran sus talleres, allí descubrió un mundo lleno de fibras y técnicas que él no conocía y que después implementó en sus diseños junto con las manos de artesanos mexicanos.

¿Qué te hizo interesarte por el diseño?

No fue algo en específico. Yo empecé en diseño pero me enfoque en moda, y de ahí comenzó todo mi gusto por este proyecto. Fue evolucionando y de la moda pasé al vestuario estético, luego escenografía y pasé a trabajar con grupos indígenas en México. Descubrí el diseño de interiores y me encantó.

Describe tu estilo  en el dieño textil…

Yo me definiría como ecléctico, moderno y sofisticado.

¿De qué manera concibes o defines la idea para generar un diseño?

Generalmente, en cada colección cuento una historia de algo que me pasó. Es partir de algo abstracto y volverlo tangible para generar las formas, lo que se hace es soltar la mano e ir trazando, y en realidad todo viene de un proceso de construir una pieza y abrirla.

¿Qué haces para generar nuevas ideas y tener colecciones únicas?

Es un proceso muy personal. En el momento que me llega la idea o un sentimiento empiezo a bocetar o dibujar y agarro camino a eso, y a los dibujos hasta que tienen forma, de pronto aparece el nombre de la colección. En realidad son momentos en mi vida que me gusta plasmar y que de alguna manera es como yo me desahogo.

¿Hasta qué punto tus diseños reflejan tu personalidad?

Lo reflejan a un 100 por ciento. Trato que sea eso, pero es más una expresión mía que otra cosa.

¿Cómo enaltece Balmaceda Studio los procesos artesanales?

Lo más importante para Balmaceda es humanizar el proceso que hay detrás de las piezas. Esto sucede debido a los viajes que hemos tenido, cuando visitamos a los tejedores, hemos desarrollado una relación familiar, somos una parentela. Yo los admiro muchísimo y, cada año fortalezco la unión cuando nos vemos. Para nosotros lo más importante de las piezas es saber quién está detrás y por qué, cuántas manos la hicieron y cuántas hubo durante el proceso. Yo digo  siempre digo que no son tapetes, son piezas únicas que traen un tema energético por la cantidad de manos que hay detrás.

Para ti los tapetes están cargados energéticamente, ¿a qué te refieres con esto?

Si porque son 20 personas tejiendo una pieza y eso es una carga energética. El valor humano que hay detrás de las piezas es fundamental, ya que el tapete pasa por muchos elementos como el lavado, el quemado, entre otras. Finalmente cruza el mundo y llega a tu casa, por eso siempre digo que no estás comprando tapetes, sino una pieza cargada energéticamente.

¿Cómo distingues las nuevas tendencias?

No me gusta fijarme en tendencias, es casarte con una idea y eso es algo pasajero, solo está de moda por determinado tiempo. Lo que hacemos como equipo es viajar una vez al año a la India y a Nepal, allí están nuestros talleres, y lo que hacemos es platicar con los artesanos sobre lo que está sucediendo en el mundo, pero pero a través de ellos. Saber qué está pasando con sus clientes en París, Londres, Italia y Brasil y con base a eso empaparnos de nuevas ideas que luego implementamos en la nueva colección.

Sobre el proceso de elaboración, ¿cómo surge la idea?

Cada colección surge de mi, son mis ideas y mis sentimientos. Luego la aterrizo con mi equipo. La próxima colección se llama Reflexiones y surge durante la pandemia. Tiene reminiscencias de Barragán y de Matías Gueri, pero sin ser tan literales.

Es dar vuelta a las cosas y verlas desde otros ángulos, para que la suma del todo sea algo interesante. También viene una parte atractiva con los clientes, donde durante el proceso nos aportan ideas y hacen que la colección sea más padre, más divertida y más original.

De tus colecciones Fossil, Monolito y Cápsulas del Tiempo, ¿en qué te inspiraste?

Fossil: Es cuando empieza el proyecto. Yo tenía una mentora que me decía que para crear había que dejar de etiquetarse, dejar de ser diseñador mexicano, dejar de ser mexicano y solo volverse creador. Llego esa parte a mi vida en un momento muy interesante, empecé desde cero y arranqué este proyecto. Fue dejar los miedos, que en esta colección los llamé monstruos y los vencí para que el proyecto pudiera suceder.

Monolito: Es la parte nostálgica de Balmaceda. Es un antes y un después de mi y de la marca. En esta colección entra el tema de apreciar y cuestionar el tiempo, saber que estuvo antes y que está ahora. Hago alusión a monolitos y piedras gigantes tejidas. Monolito habla de que nosotros no somos lo más importante, sino lo que nos rodea.

Cápsulas del tiempo: La presenté en Zona Maco como agradecimiento de haber llegado ahí y exponernos solos como marca. Fue nuestro agradecimiento al crecimiento. La colección habla de entender que todo pasa por algo y que los tiempos son perfectos, son nuestra mejor herramienta porque nos hacen más sabios, más bellos y nos hacen entender mejor las cosas.

Y finalmente Reflexiones: Una colección que surgió durante la pandemia y trata sobre el momento en que esta máquina de consumismo paró y de que todo finalizó sin avisarle a nadie. Nos obligó a pensar en el presente y no en el futuro, porque no había manera de planearlo, había mucha incertidumbre. Fue planear nuestro origen, el ver de donde vengo, quien soy y por qué. Al final, somos un estudio mexicano y fue regresar a nuestro punto de origen.

¿Qué elementos debemos de saber y/o conocer para elegir el tapete adecuado?

Pensar en el uso y en el lugar, si es un hotel o una casa en particular. El clima también es importante, hay que pensar si es frío o calor, ya con esto definimos la fibra, el look y el diseño.

¿Qué consejos nos darías para implementar el diseño textil en nuestros hogares?

Lo más importante es pensar en tu personalidad. Si lo vas a hacer tu es que plasme tu esencia y estilo de vida. Si lo va a hacer un diseñador de interiores, pedirle lo mismo porque al final es un espacio que vas a habitar, es tu nido, es tu cueva, y todo se tiene que ver reflejado para que te sientas tranquilo, feliz y agusto con los elemento que existen.

¿Tus próximos proyectos?

Hay una galería en Mónaco que está interesada en nosotros. Estamos en temas con la galería de sofisticar la colección, eso significa utilizar materiales más finos, hacer algo con cashmere, lana merino, entre otras, que son estas telas ultra finas para el mercado europeo.
Lo importante es saber que hay interés del otro lado del mundo por nuestros diseños y la marca.

También existen dos colecciones: Códices y Meteorito. La primera está inspirada en la cultura maya y la segunda en los colores de la noche, plasmarla en luces neón, luz de faro sobre la cantera y texturas oscuras. Es muy romántica.