La falda Diesel y su controversia.

En su más reciente colección, la firma Diesel, bajo la dirección creativa de Glenn Martens, nos mostró lo que parecería ser el hot item de la temporada, la falda-cinturón. Al inicio causó furor en redes sociales.

Pero ahora levanta discusiones alrededor de la funcionalidad y la moda.

Es innegable el revival que la mítica firma italiana ha tenido, gracias a la incorporación de Martens en 2020 como director creativo. El diseñador se ha encargado de compaginar los códigos característicos de Diesel, con su estética experimental, entablando una conversación con un público más joven.  

Resultado de ello, son artículos como la falda-cinturón que provocó conmoción por su innovador diseño, el cual, es un claro ejemplo de la dirección hacia donde la moda actual va. Sin embargo, hace unas semanas volvió a ser tema de conversación al ser criticada por la tiktoker ageorama, argumentando que la relación funcionalidad-precio parece no ser justa.

genuine question. did y’all look at that “skirt” and think of practicality? pic.twitter.com/TB3mQsD27a

— Kenii★彡 (@notkennii) November 2, 2022

La falda Diesel y su controversia

Estas declaraciones trajeron un debate en redes sobre si la falda de mil dólares vale la pena al ser “impráctica” y detonando la eterna pregunta: ¿La moda debería ser funcional?

Aunque la respuesta usualmente está polarizada, tenemos que reconocer que el precio de la falda va más allá de sus fines utilitarios. El trabajo de conceptualización que lleva detrás, y el ser presentada bajo una firma como Diesel, agrega un valor simbólico, que la hacen más que una prenda, una pieza conceptual.

Es evidente que el trabajo de Martens rinde frutos, pues Diesel, una marca consagrada de los 2000’s, está encaminada volverse referente una vez más. Incluso su logo se considero el logo más buscado del año.

El diseñador ha sido reconocido anteriormente por trabajar en firmas como Y Project, en donde ha demostrado cómo para él, el concepto siempre va antes que el producto.