PIERRE HERMÉ: EL PICASSO DE LA PASTELERÍA

PIERRE HERMÉ: EL PICASSO DE LA PASTELERÍA


Pierre Hermé ha redefinido el mundo de la pastelería con sus macarons de sabores innovadores y su impecable técnica. Desde los clásicos de chocolate hasta combinaciones inesperadas, cada creación es una experiencia sensorial única. 


Si bien Blair Waldorf lo dijo primero, los macarons de Pierre Hermé son, sin duda, una experiencia que no se puede dejar pasar. Apodado el «Picasso de la pastelería», su enfoque innovador y su dominio absoluto del equilibrio de sabores. Con boutiques en ubicaciones icónicas, desde Paris en Champs-Élysées hasta Doha, su universo es una parada obligada para los amantes de los dulces más sofisticados.

LOS SABORES MÁS ICÓNICOS DE PIERRE HERMÉ

Para quienes prefieren lo clásico, el chocolate es un favorito indiscutible. Pero si la idea es probar algo más fresco, sabores como frambuesa, fruta de la pasión o mango con lima son un must. Para los más atrevidos, opciones como praliné de avellana con crujiente de praliné o Earl Grey son una experiencia sensorial.

MÁS ALLÁ DE LOS MACARONS

El mundo de Pierre Hermé no se limita solo a los macarons. Su pastelería ofrece una gama de creaciones igualmente exquisitas, como sus emblemáticos Ispahan (una fusión de rosa, frambuesa y lichi), tartas de chocolate intenso y su legendaria Tarte Infiniment Vanille, que explora todas las facetas posibles de la vainilla. Además, sus boutiques son el destino perfecto para desayunos y brunches.

LA HISTORIA DE LOS MACARONS

Los macarons tienen una historia que se remonta a la Italia del Renacimiento, cuando Catalina de Médici llevó la receta a la corte francesa. Sin embargo, fue en París donde alcanzaron su máximo esplendor, y es Pierre Hermé quien ha llevado esta tradición a un nuevo nivel. Su enfoque se basa en la experimentación y en reinterpretar los sabores con un toque distintivo, redefiniendo lo que significa el lujo en la pastelería.

Fotos: Pierre Hérme